top of page

Columna de KARIN BRENNER

Directora Consejera de la comunidad Mujeres INfluyentes Chile.


UNA PREGUNTA QUE ME HIZO PENSAR


Creo que a todos nos ha pasado encontrarnos en algún seminario, reunión social o laboral, donde viene la inevitable pregunta:

¿Y tú qué haces? o ¿A qué te dedicas?


Muchas personas tienen esa pregunta totalmente resuelta con la respuesta “esperada” debajo del brazo. A otras les cuesta más esa definición y se sienten inferiores por no tener un cargo “importante”, un título, o incluso un master o un PhD.


Algunas reaccionan adornando su currículum para poder encajar y otras simplemente se sienten tan inseguras que se aíslan y no tienen ningún interés de volver a exponerse a una situación así nuevamente.


La primera vez que me hicieron la pregunta ritual, realmente me quedé muda. Estaba rodeada de mujeres exitosas y recuerdo que con timidez y casi con vergüenza contesté algo así como “soy experta en pastelería y me dedico a mi familia”. Rápidamente me senté, tratando de pasar lo más inadvertida posible.


Al llegar a mi casa, la pregunta siguió resonando en mi cabeza…

Por mi Profesion es como quiero que me conozcan? ¿Realmente es así como quiero que me recuerden, ese es el legado que quiero dejar?


Muchas veces vamos a ver a personas solo 5 minutos en nuestras vidas y esos minutos pueden marcar una gran diferencia en las vidas de otros. Lo importante es nuestra actitud frente a los demás, ser uno mismo, auténtico y sincero y no fingir algo que uno no es. Eso nos ayudará a poder conectarnos con los demás en cualquier contexto.


Después de un profundo análisis, llegué a la conclusión que cada uno tiene un talento único que lo hace ser especial y valioso.


En mi caso descubrí que mi talento innato y que más me motiva es unir a diferentes personas, culturas y tradiciones…, ser una especie de puente conector.


No es fácil descubrir el “regalo” con el que naciste…


Por eso, mi invitación es que nos miremos al espejo pero por dentro, nos conozcamos y ayudemos a los demás en este proceso.


Teniendo claro quién eres realmente, el miedo desaparece y la confianza en uno mismo gana de a poco cada batalla.






bottom of page