top of page

Cerrando 25 años de la gran Revista ED


Vivimos en un mundo que nos sorprende cada día con sus cambios y nos hace enfrentamos diariamente a diferentes noticias y realidades, muchas veces alentadoras, otras no tanto.

Hasta hace poco pensábamos que el hombre era capaz de controlarlo todo, veíamos un mundo lleno de avances tecnológicos, con excelente medicina, una gran globalización, con economías que parecían cada vez más prósperas y a pesar de los infinitos problemas que siempre existen en una sociedad, el mundo parecía casi perfecto.


De la noche a la mañana todo cambio, llevamos cinco meses y un poco más enfrentando una pandemia, que ha paralizado el mundo y nos ha obligado a reflexionar.


En medio de toda esta crisis sanitaria, además empiezan a sucumbir las economías, ya que son pocas las áreas que pueden mantenerse en pie con un mundo paralizado.


Por otra parte, nuestro país venía enfrentando una importante crisis social, que sumado a la pandemia ha golpeado a muchos sectores, todos igual de importantes, pero hoy me quiero referir en especial a mi mundo más cercano que es la estética, el arte y la decoración.


Evidentemente son áreas muy afectadas, ya que son a primera vista, cosas no tan necesarias y es así como la Revista ED, gran revista de decoración chilena, anunció el cierre de la publicación de la revista en papel. Nació como una revista de estilo de vida y decoración por ponerla dentro de una categoría, pero en realidad es mucho más, ya que fue por 25 años, la ventana para mostrar diferentes áreas de la creatividad chilena.


Tenemos tanto que agradecer ! Y por lo mismo, quiero hacer un homenaje a la Revista ED, primero por la valentía de haber creído en un proyecto de esta naturaleza el año 1995, en un momento donde la decoración o los grandes proyectos de arquitectura e interiorismo no eran temas habituales. Habían muchas casas lindas y gente con mucho talento, pero no se mostraban, menos en una sociedad muy tradicional y donde la austeridad es un valor, por lo que era un desafío lograr que esos espacios se abrieran.


La idea era mostrar mucho más que una decoración, una forma de vida, de sensibilidad, de emociones y así ir sumando personas interesadas en descubrir que detrás de un lugar físico, hay muchas formas de vivir. No importan los metros cuadrados, o si es el campo, playa, montaña, ciudad, oficina, un taller de artista, una galería de arte etc, ya que lo importante siempre fue rescatar el carácter que le imprimen los dueños al lugar, por eso en sus páginas se retratan lugares disfrutados y no recién estrenados, porque definitivamente el máximo valor lo tienen los espacios bien vividos y que hablan por sí solos.


Fue así como la Revista ED logró su objetivo y se convirtió en un importante medio de difusión de proyectos de decoración, arte, arquitectura, diseño , gastronomía y diferentes áreas de actualidad de cada momento, con un grupo cada vez más importante de seguidores que esperaban cada mes su interesante contenido. A su vez, muchos talentos se dieron a conocer a través de sus páginas, pasando a ser una importante herramienta para que nuevos profesionales pudieran difundir sus trabajos y esto sin duda fue clave para el éxito de ellos y para que en Chile se desarrollaran cada vez más estas áreas y esto ha quedado de manifiesto estos días, donde hemos visto infinitos comentarios de agradecimiento real y profundo a través de las rrss.


Así pasa la vida y no nos queda más que agradecer al tremendo equipo de la Revista ED por la cantidad de años que nos acompañaron con un profesionalismo único, entregándonos mes a mes la mejor revista de decoración chilena y que le hace el peso a las mejores del mundo.


Para muchos se transformó en una verdadera adicción, una revista con una curaduría extraordinaria, de excelente contenido y con una estética prolija, llena de creatividad, sutileza y cuidado.


En mi caso, tengo toda la colección desde el año 95 y hoy después de 25 años, recibo con nostalgia y emoción esta última edición. Además es muy fuerte y contradictorio pensar que los avances tecnológicos o la evolución de la vida hagan desaparecer cosas tan valiosas, porque en este caso no se acaba una simple revista, sino un registro potente de la estética, la belleza y el buen vivir en nuestro país, qué pasó a formar parte de la historia de todos los que gozamos por años con sus increíbles contenidos.


Siempre estuve suscrita a varias y muy buenas revistas de decoración extranjeras, pero ninguna superó jamás a la Revista ED, que además es un reflejo de nuestra idiosincrasia. Durante estos años, nos permitió a los que adoramos la estética, arte, interiorismo, decoración, arquitectura, diseño y otras áreas creativas, enriquecer nuestro trabajo y agudizar nuestra mirada, transformándose en una gran aliada, una fuente de inspiración y un medio importante para que muchos profesionales chilenos pudieran mostrar su gran trabajo.


Desde la primera edición que tuve en mis manos en Agosto del año 95, se podía apreciar el gran trabajo que había detrás, con una mirada propia, donde mezclaba temas como estilo y tradición, pasiones en el arte, objetos y piezas hechas con alma, destinos soñados en el mundo, gastronomía, la belleza de lo simple a través de la naturaleza, la agenda ED de algún personaje destacado, algunos espacios propios y casas chilenas con historias , talleres de artistas y siempre además un reportaje de tendencia internacional. Con todo esto a la vista era imposible no transformarse en una admiradora y coleccionista de la misma.


Así me convertí en una Edóloga como dice el reportaje que nos hicieron a sus fanáticos y fieles suscriptores para los 20 años y además feliz de haber tenido la oportunidad de agradecer y homenajear el importante trabajo de la revista en sus propias páginas.



El mundo ha cambiado demasiado en estos 25 años, la tecnología nos ha permitido conectarnos de otra manera y poder mirar muchas páginas a la distancia, pero nada superará el placer de dar vueltas las hojas y poder tener una y otra vez esta increíble revista en las manos, pero me quedo feliz de que pase a ser parte de una historia valiosa, dejándonos recuerdos emotivos que nos conectarán siempre con ese pasado lleno de el mejor estilo y decoración, siempre tan bien retratado!

Son equipo admirable y tengo la certeza de que cualquier nuevo proyecto será un éxito y que nos seguirán acompañando por ahora de otra forma.


Pero como siempre es bueno seguir soñando con lo que nos gusta, me quedo con la ilusión de tener nuevamente el papel en mis manos, ojalá en una gran recopilación convertida en el mejor o los mejores libros de decoración chilena, porque si hay algo que tenemos que rescatar de esta crisis, es justamente la importancia de las áreas artísticas, el mundo de la sensibilidad, de la creatividad y de todos estos saberes que a simple vista no parecen tan útiles, pero son que en realidad fundamentales para el cultivo del espíritu y el desarrollo de la humanidad, por lo que sería maravilloso volver a poner a disposición de todos este potente material.


Muchas gracias a todo el equipo ED por haber puesto lo mejor de cada uno para hacer de esta revista una verdadera obra de arte!


Gracias por el cariño qué hay en cada página y por habernos acompañado por tantos años y con el alma.


Por: Francisca Bezmalinović

Directora de la empresa Francisca Bezmalinovic y Cia Ltda, dedicada al Interiorismo, Decoración y Gestión de proyectos de arte.

Egresada Licenciatura en Estética, Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) actualmente realizando proyecto de tesis. Certificado Gestión Cultural para las Artes y la Cultura, PUC. Certificado Historia del Arte , PUC. Licenciada en Ciencias Jurídicas y Sociales, UNAB. Diplomada en Reforma Procesal Penal, UNAB.

Instagram: @franbezmalinovic

Contacto : fbezmalinovic@uc.cl

bottom of page